Lo que hace atractiva a una historia no es lo que se cuenta, sino como se cuenta...

8 abr 2012

Nunca oyó de fantasmas ni de Dios, solo te cuenta las cosas que... se te suelen perder...

¿sabes que? dejemos todo como está, al menos por estos segundos que vienen. Dejemos todo tal cual termino de quedar, con el tacto tibio de nuestras manos manteniendo estos gestos que ya son mudos.

Aparentemos solo por algún instante que todo esto no continua y que el tiempo murió acá y nosotros con el en este ultimo movimiento. Caigo yo con vos al vacío, caigo y prefiero caer porque es con vos, es raro que Yo y justo Yo elija esas sumisa figura para representar hasta donde estoy dispuesto a arriesgar por vos. Pero pasa siempre que nada es tan duro como creemos ni tan blando como aparenta sobre todo cuando se trata de nuestro sentir, y sin embargo me siento un imbécil cuando vos de verdad estas acá, cuando puedo hacer de un gesto algo que recuerdes y me pongo tonto intentando que ser protagonista de uno de los minutos de alguno de los días que me toca cruzarte.
Imaginarme sosteniendo tu mano me parece tan grande a veces que se vuelve contraste con la mayoría de mis palabras cotidianas, porque si hay algo que a mi boca le falta es vergüenza cuando habla y a pesar de eso se vuelve tímida cuando sonríe pensando en lo que no va a pasar. Porque la realidad es mas fuerte que las ensoñaciones sobre todo cuando se impone frente a tus ojos y te choca con bastante fuerza.
Solamente me es posible soñar con decirte todo esto desde este lugar tibio y cobarde de la incógnita, porque la seguridad de la negativa por no se que vez me asegura que no debo intentar mas cambiar como son las cosas.
Me pasa que la realidad a veces me la pinto como una sucesión de escenas que pueden o no ser de varias maneras distintas, me pasa también que a medida que los años me acompañaron, la capacidad de pensar que escenas podían pasar se fue haciendo mas acertada cada vez y si hay escenas que repasé en mi cabeza mil veces como para saber si algo podía ilusionarme es esa que se trata de vos y yo.
Y siempre resulta mal para mi. No es tu culpa y creo que tampoco la mía solo pasa que a veces las cosas no encajan como uno quisiese y a pesar de ello es imposible que eso no moleste.

¿sabes que? Nada de esto tiene demasiado sentido, después de todo pasa que otra vez me encuentro hablandole a la pared desnuda...



1 comentario:

Ro. dijo...

El otro día leía algo en un blog, y dije que me encantaría que alguien piense en mí en la forma que describía eso que estaba leyendo... con esto me pasó más o menos lo mismo...

Raro, bien raro.