Se despertó angustiado, el mundo se había desordenado por dos segundos pero eso había bastado para que perdiera la orientación.
Faltaba el sentido.
Respiraba irregularmente, se sentó en la cama y apoyó los pies en el suelo, el tacto con el piso le produjo un alivio indescriptible.
Ahora sabía que todo había sido parte de un sueño y que estaba otra vez despierto, pero persistía la parte mas primitiva de todo.
La angustia latiendo cada vez mas sutilmente hasta desaparecer de su conciencia, pero no se iba a ir a ningún lado, se quedaría allí.
Adentro.
Se levantó, el mundo seguía firme a sus pies y logró alcanzar el baño, mirarse en el espejo y reconocerse .
La humedad en el rostro, el frío del agua le resultó algo delicioso.
Un momento de oscuridad mientras se secaba los ojos y el latido otra vez ahí, porque no existía la certeza de que cuando enfrentase su reflejo otra vez fuese el mismo quien le devolviera la mirada.
Por casualidad eso, esta vez no pasó.
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