Creo que se trata de la libertad, de intentar aprender a ser libres.
Porque hoy no es fácil saber que se siente estar libre.
Porque no se puede, el mundo no es para todos.
Pero hay gente que cree que si.
Se encuentran con la libertad cada vez que pueden.
Porque para ellos el mundo es redondo.
Y sueñan, sufren y luchan por eso.
Así de una vez por todas dejamos de jugar a ser libres y empezamos a serlo.
Encontrar gente que se anima a ser libre.
Hay que agradecerles eso.
Porque nos recuerdan a los que recién llegamos a este lado de la vida.
Nos recuerdan que se puede luchar al menos.
Por un mundo igual.
Por un mundo libre.
Y nos muestran como sería.
A veces en algún gesto.
Con la sonrisa que reconforta.
En los gritos que animan.
Las cosas que dicen.
Porque después de todo, de eso se tendría que tratar la vida.
De ser libres.